LA SENTENCIA. EL bachatero fue compelido a pagar la suma de seis millones 500 mil pesos por concepto de prestaciones laborales a favor de Sergio Santiago, su ex-representante
Al final, la vida sigue igual, dice una canción del cantante argentino Sandro, llegar aun acuerdo y terminar con otro final esta desagradable novela que en nada contribye a la superación de la clase.
Hace tiempo, tanto Frank como Sergio debieron terminar con esta desagradable novela que en nada ha beneficiado ni a laclase artistica, pero mucho menos a los manejadores, más la terquedad pudo más que la razón.
Para ambos, amparentemente fue más provechoso debatir este sencillo conflicto en los medios porque talvez pensaron que en asunto de proyección mediatica le convendría, sin embargo la actitud de ambos ha sido un "boomerang".
Un final, que emulando la novela del escritor colombiano García Marquez, pudiera llamarse "Crónica de una condena anunciada", y Frank lo sabía. Pero fue mejor enfrentar a la prensa y haciendose eco del mal asesoramiento tratar de sacar provecho de lo negativo. No resultó.
La realidad es que el artista ha sido condenado por la jueza Cleopatra González Almonte, de la primera sala del Tribunal del Trabajo del Distrito Nacional, a pagar la suma 6.5 millones de pesos de a favor de Sergio Santiago en una sentencia que sorprendió a muy pocos, pues con los accidentadas y desafortunadas declaraciones del interprete de "Princesa", ese dictamen se veía venir.
Al momento de redactar esta noticia, no se supo si el artista apelaría, tampoco teníamos la copia de sentncia a nuestro alcance, pero hasta ahora esta es la versión orignal de esta novela que fastidió a todos. ¡Que pena!...
Al final, la vida sigue igual, dice una canción del cantante argentino Sandro, llegar aun acuerdo y terminar con otro final esta desagradable novela que en nada contribye a la superación de la clase.
Hace tiempo, tanto Frank como Sergio debieron terminar con esta desagradable novela que en nada ha beneficiado ni a laclase artistica, pero mucho menos a los manejadores, más la terquedad pudo más que la razón.
Para ambos, amparentemente fue más provechoso debatir este sencillo conflicto en los medios porque talvez pensaron que en asunto de proyección mediatica le convendría, sin embargo la actitud de ambos ha sido un "boomerang".
Un final, que emulando la novela del escritor colombiano García Marquez, pudiera llamarse "Crónica de una condena anunciada", y Frank lo sabía. Pero fue mejor enfrentar a la prensa y haciendose eco del mal asesoramiento tratar de sacar provecho de lo negativo. No resultó.
La realidad es que el artista ha sido condenado por la jueza Cleopatra González Almonte, de la primera sala del Tribunal del Trabajo del Distrito Nacional, a pagar la suma 6.5 millones de pesos de a favor de Sergio Santiago en una sentencia que sorprendió a muy pocos, pues con los accidentadas y desafortunadas declaraciones del interprete de "Princesa", ese dictamen se veía venir.
Al momento de redactar esta noticia, no se supo si el artista apelaría, tampoco teníamos la copia de sentncia a nuestro alcance, pero hasta ahora esta es la versión orignal de esta novela que fastidió a todos. ¡Que pena!...
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